sábado, 15 de octubre de 2016

Un Poquito de Bolivia


COPACABANA, LA ISLA DEL SOL, LA PAZ, TIAHUANACO EN 2 DÍAS


Dicen que el tiempo apremia, y pues a por ello chicos!!

Debido a mi larga jornada de trabajo en oficina 6X1, es muy difícil tener tiempo suficiente para  poder realizar algún viaje y descubrir nuevos mundos, así que aproveché el primer feriado que tuve (Lunes) y me fui de viaje, ¿A dónde podría ir con sólo 2 días libres partiendo desde la hermosa Arequipa?

Lo más factible y seguro, sería  ir a alguna ciudad vecina como Moquegua, Ica, Tacna tal vez; pero opté  por un tour relámpago en los hermosos y frescos parajes altiplánicos de Bolivia.

Estuve haciendo una búsqueda por internet sobre tours que me llevaran  de la isla del sol a la Paz por dos día, y el precio era de 850 soles aproximadamente, nada mal, pero, decidí hacerlo por mi cuenta, y déjenme decirles que me ahorré 600 soles, oh sí!

Bien, empecé el sábado por la tarde, tomando un bus de Arequipa a Puno por 20 soles, el viaje dura entre 5 a 6 horas; al llegar  a Puno era un poco más de media noche, así que tomé un café con leche y un sándwich en el terminal terrestre, mientras aprovechaba para  preguntar a qué hora y cuánto estaba el precio para  viajar  a Copacabana o La Paz.

Normalmente el transporte a ambos destinos es a partir de las 6:00 am, con un precio entre 20 y 30 soles dependiendo de la empresa de transporte; una señora que trabaja en los SSHH me sugirió que esperara  hasta las 3:00 am, puesto que a esa hora salen combis para la frontera de Yunguyo a sólo 10 soles, así que esperé, y efectivamente, como a las 3:15 am vino un señor ofreciendo pasajes a Yunguyo por 10 soles, tuve un poco de temor porque viajaba sola, pero si estas acompañado o en grupo, no hay problema.

Amanecer en el Titicaca. - Subida al Cerro Calvario
Llegamos a la frontera como a las 5:00 am, la temperatura a esas horas de la madrugada está bajo cero, así que es recomendable usar ropa abrigadora, sobre todo abrigarse los pies. Al llegar a Yunguyo, se cruza a pie al otro lado de la frontera, en Kasani (Bolivia) hay varias unidades que te pueden transportar hasta Copacabana por sólo 3.00 soles, y en 20 minutos ya estás en el acogedor pueblo de Copacabana. Apenas llegamos, me baje del carro y subí de prisa al cerro denominado por muchos como el “Cerro Calvario”, puesto que hay varias cruces hasta  la cima en la cual se escenifican las estaciones del Vía Crucis; en la cima del cerro hay una réplica de la Virgen de Copacabana, imagen  que convoca a miles de fieles y creyentes año a año, tanto peruanos como bolivianos; desde la cima se puede apreciar un bello amanecer , con la hermosa y amplia vista del Titicaca a tus pies.




Vista de la bahía de Copacabana desde la cima del "Cerro Calvario"




















Después de un prolongado momento disfrutando de la vista y los primeros rayos del sol, y después de haber dado un saludo a la virgen,  decidí descender para buscar algo para desayunar, llegando al centro del pueblo, vi un letrero en donde se anunciaban salidas para la isla del sol, me acerqué a preguntar y me dijeron que ya estaban subiendo a la lancha, y que salía en 10 minutos, rápidamente compré mi pasaje por sólo 15 soles (muy económico) y me apresuré a la bahía, en el camino me compre un sándwich de palta y jugo de quinua, todo por 4 soles.


Llegando a la Isla del Sol

Subida principal al mirador en La Isla del Sol
Después de casi hora y media surcando las aguas del majestuoso Titicaca llegamos al puerto de la Isla del Sol, es un destino de gran belleza con terrazas de cultivos y el lago azul de fondo; para poder entrar a la isla, hay que pagar un derecho de 5 bolivianos (2.50 soles), precio muy accesible; conocí a una pareja de Cochabamba (Verónica y Gabriel), con quienes compartí todo el recorrido, subimos caminando hasta la zona del mirador, a lo largo de todo el camino hay diversos hoteles, restaurantes y tiendas de recuerdos, todos muy coloridos y bonitos; en la zona del mirador se puede apreciar una vista muy muy muy hermosa del lago, con el fondo de montañas nevadas, es como si te transportaras a un mundo paralelo, lleno de paz, serenidad y silencio absoluto.
Luego de estar unos minutos allí bajamos hasta el puerto para esperar nuestra lancha que nos llevaría a la zona arqueológica de la isla, es muy recomendable tener  bien identificada la lancha en la cual se están movilizando, ya que a nosotros casi nos dejan jeje… 
Serenidad absoluta, La Isla del Sol

Artesanías y Tejidos, La Isla de Sol




La zona arqueológica es muy tranquila, no hay comercio  como en la bahía principal, y se puede disfrutar mejor del paisaje y su quietud. Después de unos veinte minutos partimos a Copacabana, el recorrido se sintió bastante lento, más de lo habitual, pero sin duda, el paisaje alrededor hace que uno se pierda en el tiempo.

Bahía de Copacabana
AL llegar a la bahía de Copacabana eran ya casi las 1:30 de la tarde, debo admitir que no me gustan las despedidas, así que vi a mis nuevos amigos con una sonrisa en el rostro, y sin decir adiós partí al centro del pueblo, antes de llegar a la plaza principal estaban ofreciendo pasajes para La paz a 14 bolivianos, pues parece que todo se acomodaba a mis tiempos, así que sin pensarlo compré mi pasaje y me subí al bus, antes me compré agua, un sándwich y galletas todo por 5 soles (sé que debía alimentarme mejor, pero por la emoción ni hambre tenía).
Una media hora después de partir de Copacabana, llegamos al estrecho de Tiquina, en donde hay que bajar del bus y cruzar el estrecho en una lancha, hay que pagar 2 bolivianos, ahí ya no aceptan soles, es mejor cambiar el dinero en Copacabana; las aguas del Estrecho de Tiquina son muy movidas, sentía que en cualquier momento el agua entraría en inundaría la lancha, aunque un chapuzón en el Titicaca no estaría mal, de hecho es uno de mis locos sueños, pero, era agua fría, muy fría brrrr… Ya una vez al otro lado, hay que esperar a que el bus, transportado en una balsa cruce el lago, para así emprender nuevamente nuestro viaje a La Paz.

Camino a La Paz vía Copacabana
Llegamos a la Paz como a las 6pm aproximadamente, no tenía ni idea de lo que iba a hacer, en realidad tenía un poco de temor y emoción a la vez, durante el viaje fui conversando con una señora que se sentó a mi costado y ella muy amablemente me fue dando pautas y instrucciones para no tener problemas y encontrar un buen alojamiento. Todos los buses que parten de Copacabana llegan a la Zona Cementerio, es el paradero final, me bajé del bus y empecé a caminar en dirección al centro de la ciudad, La calle Tumusla es una calle empinada, llena de locales comerciales y alojamientos, iba preguntando el precio de cada uno, los más económicos son de 45 bolivianos, yo me quedé en uno triple B, bueno, bonito y barato, já! Me costó 60 bolivianos (30 soles), tenía tv, cable, wifi, agua caliente y la habitación era cómoda y segura.


Eran las 7:30 y  no podía hacer mucho, sólo me quedaban 10 bolivianos y recién en la mañana abrían la casa de cambios, así que decidí salir a buscar mi cena y luego descansar; si eres pescetariano o vegetariano, es difícil encontrar comida en alguna ciudad que no conoces, así que me compré unas galletas, un yogurt y un emoliente como a 8  bolivianos todo. La temperatura de la ciudad altiplánica de la Paz llega a descender a -0.00 C°, es recomendable llevar una mantita polar en tu mochila, la colocas debajo de las sábanas y duermes súper bien.

Desayuno con Murillo

Al despertar, esperé impaciente para cambiar mi dinero por pesos bolivianos, ya había preguntado cómo llegar a la plaza Murillo, una taxi me cobraría unos 15 bolivianos aproximadamente, pero caminando me tomó solo 10 minutos, en el camino me compre un súper pote de ensalada de frutas con yogurt y cereales a sólo 5 bolivianos, súper económico  y delicioso!, llegué a la Plaza Murillo y me senté en una banqueta a tomar mi desayuno. Desde los años coloniales, esta plaza arbolada ha sido el centro histórico de la ciudad y, hoy día, sigue siendo un punto fundamental de la vida política de Bolivia. Toma su nombre de Pedro Domingo Murillo, quien fue una figura importante en la Guerra de la Independencia. Es una plaza pequeña, acogedora, rodeada de grandes edificios  de pintoresca arquitectura, el Palacio Presidencial, con soldados uniformados al frente, así también el palacio Legislativo, el edificio de canal  2, canal televisivo nacional. 

Plaza Murillo, La Paz

Estación Linea Roja, Mi Teleférico
Después de mi “privilegiado” desayuno en la Plaza Murillo, me enrumbé hacia la estación del teleférico Línea roja, que es el que estaba más cerca de mi ubicación; en La Paz hay actualmente 3 líneas o circuitos de Mi Teleférico, Línea roja, amarilla, Verde y, aún en construcción el Teleférico Línea Azul. Fue la primera vez que subí a un teleférico,  y en verdad estaba tan emocionada por descubrir la experiencia que me olvidé por completo que tenía miedo a las alturas y vértigo ja! Compré mi ticket a 3 bolivianos y subí a la pequeña cabina, me senté al costado de una señora que estaba acompañada por su esposo y su hijo, cuando de pronto se cerraron las puertas y se empezó a mover OMG!!!!!! Sentí como temblaba la cabina y de pronto mi estómago amenazaba  con salir volando por mi pecho, no tenía de donde sujetarme e imagino que en mi rostro se dibujó el pánico, cuando de pronto la señora muy dulce ella, me dijo tranquila hija, todo está bien, es seguro; yo la mire y le dije con mi voz entrecortada, no… no tengo de dónde agarrarme, entonces ella me agarró de la mano y me dijo, no pasa nada, mientras me sujetaba fuertemente la mano, entonces le pregunté si era normal que tiemble, sonrió y me dijo otra vez, no pasa nada. Una vez superada mi primera impresión a bordo del teleférico, y superado el pánico jajaja… comencé a apreciar y disfrutar el recorrido, sin soltar la mano de la dulce dama; quien me iba relatando historias sobre la formación de las montañas que rodean la ciudad; al llegar al punto final del ascenso, me despedí de la señora y su familia y me quedé a apreciar la vista toda la ciudad, sin duda sin palabras, es una vista impresionante, la ciudad alojada a los pies del volcán dormido Illimani, Inti Illimani (nombre compuesto por el termino quechua inti "Sol", y la palabra Aimara Illimani "águila dorada").

Camino a Tiahuanaco

Después de descender nuevamente por el teleférico, me dirigí a mi hotel, ya que tenía que entregar la habitación antes del mediodía, luego de ello me dirigí nuevamente a la zona cementerio, allí hay un paradero de combis para el pueblo de Tiahuanaco, que es una antigua ciudad arqueológica capital del estado Tiahuanacota, a 15 km al sudeste del lago Titicaca. Tiahuanaco fue el centro de la civilización Tiahuanaco, una cultura preincaica que basaba su economía en la agricultura, la arquitectura y la ganadería. El pasaje hasta Tiahuanaco me costó 15 bolivianos, el viaje dura aproximadamente 2 horas. Al llegar, hay que pagar un derecho, con el cual se puede ingresar a la ciudad arqueológica, y a los museos lítico y cerámico; el precio del derecho de ingreso depende de la nacionalidad de uno, para los bolivianos el precio es 15 bolivianos, yo tuve que pagar 80 bolivianos.

La ciudad de Tiahuanaco se caracteriza por su arquitectura decorada con relieves y planos incisos colocados sobre estelas; está compuesta por construcciones arquitectónicas importantes: Kalasasaya, Templete Semi-subterráneo, Pirámide de Akapana, Puerta del Sol y Puma Punku también grandes pirámides y esculturas. Lo que más me encantó fue el monolito Bennett, en el museo lítico, es una escultura de una sola pieza, de una altura de  7,3 metros, anchura  1,20 metros y pesa  20 toneladas, es impresionante, me quedé enamorada, el amor a primera vista sí que existe ;)
Monolito Bennett, o Estela Pachamama

Impresionante
En otro de los ambientes del museo lítico hay varios monolitos muy muy hermosos, lamentablemente para los visitantes, y en resguardo del patrimonio cultural no se permiten tomar fotografías, es una experiencia única. 

Otra de las principales atracciones es la famosa Puerta del Sol, que se encuentra en la ciudad arqueológica, la puerta tiene en la parte superior una imagen del Señor de los báculos, comúnmente confundido con Viracocha, que está rodeado de unas criaturas aladas que se arrodillan ante él, algunas de estas figuras representan hermosas cabezas de cóndor; la puerta quedó inconclusa ya que hay varias figuras sin acabar, como si los tallistas hubiesen abandonado precipitadamente el martillo y el cincel.
Puerta del Sol

Monolitos de Piedra
Después de mi recorrido en el complejo arqueológico, como a las 3 pm, emprendí caminata hasta la carretera binacional para  tomar algún carro que me lleve a la frontera con Perú, en Tiahuanaco hay movilidad para La Paz hasta las 5 pm: del pueblo de Tiahuanaco hasta la carretera binacional hay que caminar como unos 20 minutos, minutos los cuales compartí con una par de estudiantes que también caminaban hasta la carretera para encontrar algún carro que los lleve hasta sus hogares, generalmente me cuentan que la mayoría de estudiantes son de pueblitos alejados y tienen que viajar en carro o bici para poder llegar al colegio.

Estuve esperando como media hora hasta que un carro me recogió a mí y a otra pareja hasta Desaguadero, frontera entre Perú y Bolivia, el pasaje nos cobró a 10 bolivianos, el tiempo del recorrido de la entrada a Tiahuanaco  hasta Desaguadero es de 30 minutos; apenas llegamos a Desaguadero Bolivia, caminé como instinto propio hasta el puente que conecta ambas naciones, cruzando el puente hay una comisaria, en donde se puede pedir cualquier tipo de información, me acerqué y le pregunté a un policía en dónde podía encontrar carros para Puno, una vez que llegué al paradero de combis, había un carro en donde solo faltaban 3 pasajeros, hay autos que cobran 15 a 20 soles, el medio de transporte más económico son las combis, por 10 soles te llevan hasta el terminal de Puno.

Desaguadero, Frontera de Perú - Bolivia
Una vez en la combi, un delicioso aroma invadió mi olfato…. Oh siii… yummy yummy… Deliciosa comida Peruana!!!  Y me acordé que tenía que almorzar, me bajé corriendo de la combi y compré mi almuerzo, a sólo 4 soles… definitivamente la vida es más económica en el sur altiplánico. A lo largo del viaje de Desaguadero a Puno pude apreciar el atardecer y vi hundirse el sol en las profundas aguas del Titicaca, enigmático sin duda, menudo espectáculo, como para cerrar con broche de oro.

Al llegar al terminal de Puno, compré mi pasaje a Arequipa  a 20 soles, llegué  a Arequipa como a la 1:30 am, directo a descansar y al despertarme directo a la oficina. Fue un fin de semana corto para un viaje pero muy muy productivo y memorable.

Y sacando mis cuentas partí de Arequipa con 280 soles en efectivo, y retorné con 47  de vuelto. Nada mal; ahora insisto, la alimentación es muy importante, sólo en el caso de que seas pescetariano o vegetariano a veces hay dificultad para encontrar comida, pero siempre hay forma de cuidar nuestra alimentación, la salud es muy importante, no hay que descuidarla.

Más allá del poco tiempo y de todo, estoy muy satisfecha por lo vivido y aprendido, y muy agradecida con la hermosa gente que conocí.

Sin duda, la mejor escapada ;) 

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